Dentro de la amplia gamma de remedios naturales que existen para hacer frente al acné queremos presentar los siete remedios que han demostrado ser efectivos para algunos adolescentes.
Es muy importante recordar que no verás cambios drásticos de la noche a la mañana, por lo tanto, ten un poco de paciencia y prueba el remedio que elijas durante unas semanas para obtener resultados.
1. Exfoliación natural.
Combina una base de 2 cucharadas de aceite de coco o miel con 2 cucharadas de una sustancia arenosa, ya sea sal marina o avena molida. Esto te ayudará a combatir las bacterias y los hongos que pueblan la piel.
El secreto está en exfoliar suavemente, usando un movimiento circular. Cuando termines, retira el exfoliante restante con un paño húmedo y enjuagua bien la piel con agua fría.
2. Albahaca.
En un estudio publicado en el International Journal of Cosmetic Science, los aceites esenciales tanto de albahaca santa (Ocimum sanctum L) como de albahaca dulce (Ocimum basilicum L) probaron su eficacia contra la Propionibacterium acnes, bacteria vinculada al acné.
Las formulaciones que contenían aceite de albahaca dulce mostraron una mayor actividad contra las bacterias que las que contenían albahaca sagrada, aunque ambas fueron efectivas.
Otra opción es tomar té de aceite de albahaca sagrada (también conocido como té Tulsi), que ayuda a mantener unos correctos niveles de hormonas y glucosa en sangre, ya que estos dos factores están involucrados con el desarrollo del acné.
3. Probióticos.
Algunas investigaciones sugieren que los suplementos probióticos pueden ser un tratamiento seguro para el acné. Ya sabemos que los probióticos estimulan el sistema inmunitario y la digestión, por lo que solo por esta razón las bacterias beneficiosas podrían ayudar con el acné.
Elije un suplemento que proporcione al menos tres o cinco especies diferentes de bacterias.
En un estudio de 12 semanas de 45 mujeres con acné, se probaron tres grupos: uno recibió un suplemento probiótico, otro recibió minociclina (un antibiótico común para el tratamiento del acné) y el tercero tomó probióticos y minociclina. Todos los grupos mostraron una mejora significativa en las lesiones de acné, pero la mayoría se observó en aquellos que tomaron tanto el probiótico como la minociclina.
4. Guggul.
En un estudio publicado en el Journal of Dermatology se demostró que una hierba ayurvédica llamada guggul (también conocida como guggulsterona) es mejor que la tetraciclina antibiótica en el tratamiento del acné quístico.
Las personas que tomaron 25 mg de guggulsterona dos veces al día durante tres meses superaron a los 500 mg/día de tetraciclina. La hierba fue especialmente beneficiosa para aquellos que tenían piel grasa.
5. Cáscaras de naranja.
Muele las cáscaras de dos naranjas y añade suficiente agua para hacer una pasta. Después extiende la pasta sobre las áreas afectadas y manténla durante 20 a 25 minutos. Enjuagua la cáscara con agua fría, seca la cara con palmaditas y usa un humectante completamente natural.
El ácido cítrico y la propiedad astringente de la cáscara de naranja son el secreto de este tratamiento para el acné.
6. Plátanos.
Consiste en frotar cáscara de plátano sobre la cara y otras áreas afectadas. Mantenlo durante 30 minutos, luego lávalo con agua fría, secar e hidratar.
La luteína es un potente antioxidante que se encuentra en las cáscaras y puede ayudarte a reducir la inflamación al tiempo que promueve el crecimiento celular saludable.
7. Té verde.
Puede ser útil tanto por vía tópica como interna para controlar el acné. Contiene un poderoso antioxidante llamado epigalocatequina-3-galato (EGCG), que ha demostrado reducir la inflamación, el crecimiento bacteriano y la producción de sebo (sustancia similar a la cera en las espinillas del acné).
Vierte 100 ml de agua hirviendo sobre 2-3 cucharaditas de hojas sueltas de té verde orgánico o 1 bolsa de té verde. Deja reposar durante 5 minutos, cuela las hojas y deja que el té se enfríe. Aplica el té enfriado en la cara u otras áreas afectadas con un paño suave, una botella con atomizador o usa la bolsa de té directamente. Después de unos 10 minutos, puedes enjuagarte la cara con agua fría.