El lavado de manos es una de las formas más efectivas para prevenir la transmisión de infecciones, pero los jabones y otros factores pueden romper la barrera que estamos tratando de proteger.
Debido a la actual situación generada por el COVID-19, es importante lavarse las manos con una mayor frecuencia de lo habitual, por eso los dermatólogos comparten consejos que pueden ayudar a mantener tu piel sana.
1. Lavar con agua tibia.
Para un lavado de manos que supere los 20 segundos de duración es preferible utilizar agua tibia, ya que la caliente le quita a las manos su capa de aceites naturales.
Es preferible que laves tus manos con agua que ronde una temperatura aproximada a la de nuestro cuerpo (35-37ºC), con abundante jabón y una duración mínima de 20 segundos.
2. Usa jabón humectante.
Muchos jabones pueden hacer que la piel se seque y agriete, por ello es más aconsejable intentar utilizar un jabón humectante con ingredientes como la glicerina y lanolina.
También es aconsejable utilizar el jabón en forma liquida, ya que el de pastilla ya que los aglutinantes que se utilizan para su fabricación tienen un pH alto, lo que provocara sequedad en la piel de las manos.
3. Aplicar crema hidratante.
Los expertos sugieren usar cremas o ungüentos en lugar de lociones, lo que impide que la piel pierda parte de su agua.
Las cremas hidratantes ayudan con el cuidado de la piel porque:
· Restablecen la función barrera de la epidermis
· Proporcionan una película protectora
· Rellena las pequeñas grietas entre escalas
· Aumentan el contenido de agua de la epidermis
· Calmar la piel
· Mejoran la apariencia y textura de la piel
Los ingredientes en humectantes tópicos que ayudan a proteger la piel incluyen:
· Oclusivo: ácido lanolina, ácido esteárico, triglicéridos caprílicos / cápricos, aceite mineral, parafina, vaselina, ciclometicona, dimeticona, escualeno.
· Humectantes: pirrolidina de sodio, ácido carboxílico, lactato, urea, glicerina, miel, sorbitol.
· Emolientes: ciclometicona, dimeticona, miristato de isopropilo, octanoato de octilo.
Se recomienda usar una crema hidratante después de cada lavado, antes de acostarse y cada vez que notes la piel seca.
4. Usa guantes.
Para las personas con la piel más seca, se aconseja que tras el lavado de manos y la aplicación de una crema hidratante se utilicen posteriormente y durante 1-2 horas unos guantes de algodón, consiguiendo de este modo mantener la piel de las manos más húmedas durante 6-8 horas.
El uso de guantes en días fríos y ventosos también puede evitar que el viento dañe aún más la piel seca.
5. Vaselina.
Si padeces afecciones de la piel como eczema o psoriasis y además vas observando que la piel se está volviendo cada vez más seca o agrietada debido a un mayor lavado, puedes optar por la vaselina y aplicarla directamente sobre llagas o áreas agrietadas. Esto aliviará la zona afectada y la protegerá de daños mayores.
6. Sustituye el jabón desinfectante para manos por desinfectante.
Si tus manos están demasiado agrietadas para lavarlas, el desinfectante de manos es otra opción para realizar el lavado de manos hasta que la piel se recupere.
Aun así, es preferible que continúes usando jabón líquido para lavarte las manos, antes de comer, después de ir al baño y cuando veas que tus manos están visiblemente sucias.
7. Secado.
Las toallas de papel son las más recomendables, pero si usas toallas de tela, cada persona en tu casa debe tener su propia toalla y reemplazándolas por toallas limpias cada 3 días.
Intentan secar las manos sin restregar de manera fuerte, es preferible hacerlo con pequeños “golpecitos”, pero asegúrate de que las manos estén completamente secas, ya que los gérmenes se transfieren más fácilmente en las manos húmedas.