El comienzo de la primavera lleva asociado una serie de patologías estacionales que se manifiestan con síntomas que en algunos casos pueden llegar a confundirse con los del COVID-19.
En España, las gramíneas, el plátano de sombra y el olivo provocan diferentes síntomas en los más de 8 millones de alérgicos al polen durante los meses de abril, mayo y junio. Desgraciadamente en esta ocasión estas alergias respiratorias convivirán con el coronavirus Covid-19.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que dentro de los síntomas por los que se manifiesta el Covid-19, son la fiebre, el cansancio y la tos seca los que más ayudan a la hora de diferenciar esta enfermedad de las patologías alergias primaverales.
Hay que tener en cuenta, por lo que sabemos actualmente, que la mayoría de las personas, aproximadamente el 80%, que se infectan por el nuevo coronavirus son asintomáticos o presentan síntomas leves que les permiten recuperarse sin necesitar, ningún tratamiento de apoyo.
Sin embargo, en algunas de estas personas infectadas pueden aparecer síntomas como: dolores, congestión nasal, rinorrea, dolor de garganta o diarrea, que pueden confundirse con los propios de una enfermedad alérgica. Para la OMS estos síntomas suelen ser más leves y de aparición más gradual en los infectados que en los alérgicos.
Por otro lado, el Ministerio de Sanidad de nuestro país explica que, cuando los alergenos ingresan por primera vez en el cuerpo de una persona predispuesta a las alergias, se produce una serie de reacciones y se generan anticuerpos específicos contra esa sustancia.
Como consecuencia se desarrollan una serie de síntomas que no coinciden con los establecidos para diagnosticar coronavirus: picor en los ojos, congestión nasal (aunque en algunos casos de Covid-19 se presentan, pero no es lo habitual), rinitis y estornudos.
También el asma es otra enfermedad respiratoria que aumenta su incidencia durante la primavera. Aunque la dificultad respiratoria es un síntoma compartido con el coronavirus, existen otros exclusivos de la enfermedad. Entre ellos se encuentran las sibilancias y el insomnio, que son 2 síntomas no reconocidos en el Covid-19.