El yoga para los ojos puede ayudarte a aliviar el estrés.


Una persona adulta pasa una media de 3 horas diarias mirando la pantalla de su dispositivo móvil (teléfono o tablet), lo que equivale a 45 días al año. Todo ese tiempo es uno de los principales factores que contribuyen a la fatiga visual. 

El funcionamiento de nuestra visión esta basado en delicados músculos y nervios a los que exigimos, casi sin darnos cuenta, un constante y agotador trabajo a lo largo del día, teniendo esto a medio y largo plazo repercusiones negativas en la calidad de nuestra visión.

La aparición de síntomas, como: dolor, cansancio, ardor o sensación de picor en los ojos; sensibilidad a la luz; visión borrosa; y dolores de cabeza pueden indicarnos que nuestros mecanismos de acomodación visual se están agotando.

El yoga y más concretamente el yoga ocular puede ayudarnos con este problema para nuestra salud. Existen un conjunto de ejercicios que podemos realizar durante todo el día para fortalecer nuestra visión.

Es importante destacar que los síntomas antes descritos pueden indicar la aparición de otras enfermedades oculares, como las cataratas o el glaucoma, lo que hace muy importante consultar con un profesional médico antes de comenzar con estas actividades.

 Como hacer yoga para los ojos.

El yoga ocular está basado en 3 tipos de actividades o ejercicios, según los objetivos que deseamos conseguir:

Ejercicios de relajación: incluyendo movimientos de cuello y cabeza, que tienen como objetivo el estiramiento y relajación de la musculatura visual.

Ejercicios de tonificación: para aumentar la elasticidad y flexibilidad de esta musculatura.

Ejercicios de acomodación: trabajando cristalino y musculatura ciliar mediante la observación de objetos a diferentes distancias.

Una tabla básica de ejercicios que puedes realizar y que englobaría todos estos objetivos, sería:


  • Cierra los ojos y mira repetidamente arriba y abajo, luego a izquierda y derecha. Mientras lo haces, imagina que estás mirando los números en un reloj frente a ti. Repite mirando de 12 a 3 y luego de 6 a 9. Se debe realizar esto 5 veces y luego invertir la dirección. 

  • Cierra los ojos durante varios segundos para aumentar la humedad en los globos oculares. Entonces haz zigzags. Mira de izquierda a derecha y luego de derecha a izquierda con los ojos cerrados y posteriormente de arriba abajo, también con los ojos cerrados. 

  • Parpadea rápidamente varias veces y luego cierra los ojos y relájate durante 20 segundos. Mira lo más que puedas hacia abajo con los ojos cerrados, lo más que puedas hacia la izquierda, lo más que puedas hacia arriba, lo más que puedas hacia la derecha, luego invierte la dirección manteniendo cada posición durante 5 segundos.

  • Frota tus manos juntas rápidamente y luego coloca la base de tus palmas sobre tus ojos cerrados. Sosten hasta que el calor de tus manos haya sido absorbido por sus ojos.

  • Desde donde estás sentado, elige un objeto en la distancia y míralo sin parpadear durante 20 segundos. Coloca tu pulgar inmediatamente debajo del punto de concentración. Luego comienza a cambiar tu enfoque entre el objeto y la punta de su pulgar. Repite varias veces. 

Como en el yoga en general, el control de los movimientos respiratorios mediante la ejecución de los ejercicios es fundamental para obtener resultados más positivos.