A medida que envejecemos nuestro cuerpo va experimentando una serie de cambios. Junto con las trasformaciones más evidentes, como la aparición de arrugas, canas o la rigidez articular, ocurren otros cambios que son menos obvios. Como dicen, nos hacemos más sabios con la edad. Ahora sabemos que también que nos hacemos más anchos, más largos y más profundos en ciertos aspectos.
1.- Las cuencas de los ojos se ensanchan
A medida que los huesos faciales retroceden con la edad, las cuencas de los ojos se ensanchan, tanto en hombres como en mujeres, pero antes en mujeres en comparación con los hombres. Las cuencas de los ojos en expansión hacen que la cara se vea más vieja, ya que hacen que se acumulen tejidos blandos y grasos alrededor de los ojos, lo que conduce a varios cambios físicos, que incluyen patas de gallo más visibles y exceso de piel que cuelga sobre los párpados.
2.- Las orejas se hacen más largas y anchas
Este efecto ocurre tanto en hombres como en mujeres, debido a varios factores, como la pérdida en la elasticidad de la piel y de la consistencia del tejido conectivo. También existe el efecto de la fuerza de la gravedad con el tiempo (especialmente si usa pendientes pesados). El alargamiento ocurre no solo en el lóbulo de la oreja, que no es más que tejido blando, sino también en la parte de la oreja que está hecha de cartílago.
3.- Nariz caída
La nariz deja de crecer en la adolescencia, pero su forma continúa cambiando con el tiempo. Los ligamentos y otros tejidos conectivos que sostienen la punta de la nariz se debilitan. El hueso maxilar (ubicado arriba de los dientes y debajo de la punta de la nariz) retrocede, lo que contribuye al aspecto caído. Y el aplanamiento del área de la frente sobre la nariz, otro cambio que ocurre con la edad, da la apariencia de que la nariz se ha alargado.
4.- Cambios de voz
Comenzando en la mediana edad, se producen una gran cantidad de cambios en las cuerdas vocales y las estructuras asociadas, por ejemplo, los músculos de las cuerdas vocales se van atrofiando, los tejidos a su alrededor se hinchan y se rompen, y el cartílago de la laringe (caja de voz) se pone rígida. Estos cambios interfieren con la capacidad de las cuerdas vocales para vibrar adecuadamente, lo que resulta en una voz más débil o más áspera, o una que puede ser más baja o más alta en el registro. El estrógeno en las mujeres retrasa algunos de estos cambios.
5.- Cambios en la caja torácica
La caja torácica se vuelve más redonda y el ángulo de las costillas con respecto a la columna se vuelve más horizontal. También se producen cambios en el tamaño y la forma de cada una de las 24 costillas, como se vio en un estudio de 2014, que examinó las tomografías computarizadas de 339 personas en todo el rango de edad (desde el nacimiento hasta los 100 años). Estos y otros cambios estructurales hacen que el tórax sea más rígido, lo que puede aumentar el riesgo de fracturas de costillas cuando las costillas se presionan.
6.- La pelvis femenina se retrae
Desde la pubertad hasta los 40 años aproximadamente, la pelvis femenina es más ancha que la masculina. Pero la pelvis se estrecha en la mediana edad en las mujeres. El cambio puede estar relacionado con el estrógeno, que aumenta durante la pubertad y disminuye a partir de la perimenopausia, ya que esta hormona afecta el crecimiento óseo.
7.- Los pies se ensanchan
Con la edad, uno de los tres arcos en el pie (arco longitudinal medial) se aplana debido a varios factores, incluido un debilitamiento del tendón que conecta un músculo en la parte posterior de la espinilla con el pie, lo que resulta en un pie que es más ancho y tal vez un poco más Este cambio estructural altera la forma en que el pie absorbe el estrés al caminar o correr, y puede provocar dolor en el pie y lesiones por uso excesivo.
