Aunque los controles sanitarios no detectan niveles peligrosos en las frutas y verduras que consumimos, todavía se siguen encontrando en muchas de ellas demasiados pesticidas en una misma pieza, desconociéndose si esta combinación podría potenciar sus efectos tóxicos.
El consumo de frutas y verduras de forma diaria, es imprescindible para proporcionar al organismo determinados nutrientes esenciales para nuestra salud, especialmente en mujeres embarazadas, bebés, ancianos y determinados enfermos crónicos.
La mayoría de estas frutas y verduras que consumimos proceden de la agricultura convencional, que es aquella que utiliza pesticidas sintéticos y que se diferencia de la agricultura orgánica porque esta última no utiliza este tipo de pesticidas, presentando como único problema el elevado coste económico que supone para la mayoría de las familias recurrir exclusivamente a esta agricultura para adquirir todos las frutas y verduras que debemos consumir.
Afortunadamente se puede decir que gracias a los controles sanitarios y a determinadas medidas que nosotros podemos realizar, se puede minimizar la exposición a pesticidas cuando consumimos productos procedentes de la agricultura convencional.
¿Cuáles son los productos que presentan mayor número de pesticidas?
Para contestar a esta pregunta, hemos consultado tanto la lista que proporciona la EWG, un grupo norteamericano sin ánimo de lucro que analiza 51 frutas y verduras, junto con un informe de la Organización de Consumidores de España (OCU).
En ambos casos las peras y fresas encabezan el ranking de productos con mayor número de pesticidas, sin que en ningún caso sus niveles sean peligrosos para la salud de forma individualizada.
Las espinacas, nectarinas, manzanas, melocotones, cerezas, uvas, apio, tomates, pimientos y patatas, completarían este grupo de doce frutas y verduras que en algunos casos pueden llegar a contener 5 tipos diferentes de pesticidas en una misma pieza.
¿Cómo minimizamos la exposición a estos pesticidas?
- La forma más habitual y eficaz para eliminar el contacto con pesticidas es pelar las frutas y verduras, pero en muchos casos haremos perder a estos productos una cantidad importante de nutrientes, fundamentalmente vitaminas, sales minerales y fibra. Aun así, esta medida se recomienda para frutas como las peras y manzanas. En el caso de las verduras de hoja verde se deben eliminar las hojas más exteriores.
- Para lavar otras frutas es conveniente tenerlas al menos de 1 a 5 minutos en agua fría. Si lo hacemos en un cazo se puede añadir un poco de bicarbonato sódico o una mezcla de vinagre y limón, volviendo a lavar posteriormente la fruta. En el caso de vegetales de hoja verde, como lechugas, acelgas o espinacas, se lavan hoja a hoja con agua fría y posteriormente se secan con papel de cocina, arrastrando así el pesticida que aún pudiera quedar.
- Elegir productos de temporada, siempre que sea posible, pues contienen menos sustancias químicas destinadas a mejorar su conservación.
- En el caso de elegir productos procedentes de la agricultura orgánica, debemos comprobar que lleve el sello de garantía correspondiente. Debemos también lavar estos productos antes de consumirlos, ya que el hecho de no llevar pesticidas no excluye el riesgo de otras sustancias y patógenos.
Síguenos en: