Las dos proteínas presentes en la mayoría de las enfermedades recientemente descubiertas.

Los avances que ha experimentado la investigación genética en los últimos años, han permitido a los científicos profundizar en el conocimiento de un grupo de proteínas, las p38MAPK, descubriendo a dos nuevos miembros de esta familia que juegan un papel fundamental en el desarrollo de múltiples patologías.


Lo que ya se conocía

Hasta ahora se conocían dos miembros de esta familia, la p38alfa y p38beta, fundamentalmente por estar en mayor cantidad y por el papel que juegan  en la regulación de la respuesta de nuestras células ante estímulos exteriores adversos como la irradiación o un choque térmico, entre otros. 

Durante años, debido a no disponer de las herramientas biotecnológicas adecuadas, otros dos miembros de esta familia habían pasado prácticamente desapercibidos para los científicos, son las p38gamma y p38delta, también llamadas p38 alternativas.



Lo que recientemente se ha descubierto

El estudio realizado en el Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, destaca la importancia del papel que juegan estas proteínas p38 alternativas en múltiples patologías como enfermedades inflamatorias, cáncer, diabetes o enfermedades neurodegenetivas.

Se ha podido demostrar su intervención en la regulación de la respuesta de nuestro sistema defensivo frente a agresiones externas. De esta forma en las investigaciones con ratones se ha averiguado, que aquellos que carecen de p38 alternativas tienen una menor susceptibilidad a padecer enfermedades como la artritis, colitis o dermatitis.

Del mismo modo, es interesante ir descubriendo como en los últimos meses diferentes publicaciones científicas van poniendo en evidencia la vital importancia que la presencia de estas proteínas tiene en el desarrollo de enfermedades tan importantes como el cáncer.


Lo que se podrá conseguir en el futuro

Ahora ya sabemos que las proteínas p38gamma y p38delta son esenciales para el correcto funcionamiento de nuestro sistema defensivo y por tanto para el conjunto de nuestro organismo, pero también están implicadas en numerosas enfermedades, abriendo así una nueva vía para conseguir fármacos más eficaces contra enfermedades que actualmente todavía siguen siendo devastadoras.