Cuando se visitan paises tropicales y subtropicales, los viajeros pueden estar expuestos a infecciones intestinales provocadas por gusanos parasitarios (helmintos), generalmente asociado a bajos niveles de higiene y saneamiento que facilitan la contaminación del agua, suelo y alimentos.
En muchas ocasiones los síntomas de estas infecciones digestivas, aparecen pasado un tiempo de la finalización del viaje, lo que puede llevar a un diagnóstico erróneo o tardío de la enfermedad.
Los principales helmintos a los que puede exponerse el viajero, son los siguientes:
1- Anquilostomas: son un riesgo en aquellos lugares donde el suelo está contaminado por excrementos tanto humanos como caninos. Los humanos se infectan por las larvas del gusano que penetran en la piel. Se trata con mebendazol o albendazol.
2- Tenias: las dos variedades principales de este parásito, se adquieren por la ingesta de carne cruda o poco cocinada, tanto de res vacuna como de cerdo. Otra variante son los equinococos, donde el hombre se infecta por contacto con perros infectados, provocándose quistes hidatídicos y también con zorros infectados, apareciendo entonces una forma más grave de infección denominada equinocosis alveolar.
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3- Nemátodos: se transmiten a partir de tierra contaminada que transmite los parásitos a frutas y verduras, que causarán la infección en el hombre si se consumen sin estar cuidadosamente lavados. También se puede transmitir a través de la manos al manipular alimentos contaminados por la tierra, como en mercadillos callejeros o aguas contaminadas. El tratamiento también se realiza con mebendazol o albendazol.
La medidas que se pueden tomar durante un viaje a zonas con riesgo para evitar los alimentos o bebidas inseguras, son las siguientes:
- Evitar los alimentos que se hayan mantenido a temperatura ambiente durante varias horas ( comida no cubierta en buffets, comida en la calle o vendedores ambulantes).
- Evitar los alimentos crudos, menos frutas y verduras que deberán ser lavadas cuidadosamente, evitando la fruta con la piel dañada.
- Evitar el hielo a no ser que se haya elaborado con agua segura.
- Evitar los helados procedentes de fuentes no fiables, como vendedores ambulantes.
- Evitar lavarse los dientes con agua no segura.
- Hervir la leche que no este pasteurizada.
- Lavarse siempre las manos con agua y jabón antes de elaborar o consumir un alimento.
- Generalmente las bebidas y comidas cocinadas a más de 60º C son seguras.