Algunas mujeres jóvenes, generalmente en su época adolescente, que realizan deporte de forma intensa, pueden presentar trastornos en la conducta alimentaria junto a alteraciones en la menstruación y osteoporosis; lo que se denomina la triada de la atleta.
Esta triada solo se presenta en mujeres y puede hacerlo con sus tres componentes, aunque también hay casos en los que solo se presenta uno o dos de estos factores. Es mucho más frecuente en las personas que practican deportes donde se valora la delgadez, como la gimnasia rítmica, ballet, patinaje artístico o en aquellos en que se clasifican a los deportistas en diferentes categorías según su peso.
Suele darse en mujeres jóvenes muy competitivas, donde la confluencia de factores como una baja autoestima, tendencia al perfeccionismo y la estrés provocado por la presión tanto familiar como del resto de compañeros en caso de deportes de equipo, las expone a desarrollar trastornos de la conducta alimentaria.
Vamos a conocer un poco más los componentes de esta triada:
1) Alteraciones en la conducta alimentaria
La mayoría de las chicas afectadas por la triada de la atleta, intentan perder peso para mejorar su rendimiento deportivo. Puede aparecer de diferentes formas, desde no ingerir la cantidad suficiente de calorías para hacer frente a la demanda de energía que supone la actividad deportiva, evitar determinado tipo de alimento, como las grasas, o presentar trastornos graves de la alimentación como la anorexia o bulimia nerviosa.
Los signos y síntomas que pueden aperecer en estas chicas con transtornos de la conducta alimentaria pueden ser:
. seguir haciendo dieta aunque ya haya perdido peso.
. excesiva preocupación por la comida y el peso corporal.
. ir al baño a menudo durante o después de las comidas.
. uso de laxantes.
. pelo y uñas quebradizos.
. caries dentales, ya el en la chicas con bulimia el esmalte de los dientes está desgastado debido a los vómitos.
.sensibilidad al frío.
.valores bajos de frecuencia cardíaca y tensión arterial.
2) Amenorrea
Cuando una mujer hace ejercicio físico intenso sin ingerir la calorías que necesita, generalmente disminuirá la producción de hormonas, lo que afectará a la regularidad de su ciclo menstrual, pudiendo en algunos casos llegar a dejar de menstruar. Como en la época de la adolescencia y sobretodo en los primeros años de menstruación tras la menarquia, es normal cierta irregularidad en los ciclos menstruales, este será un dato que aisladamente no tendrá en principio demasiada consideración.
3) Osteoporosis
Los bajos niveles de estrógenos junto con una ingesta deficiente de ciertos nutrientes como el calcio, favorecerán la aparición de osteoporosis, consistente en un debilitamiento de la estructura de los huesos que supone una disminución en la densidad de la masa ósea. Como en la adolescencia se debería incrementar al máximo el desarrollo de la masa osea, este proceso de osteoporosis puede llegar a arruinar su carrera deportiva.
Los consejos que se dan a las jóvenes deportistas para ayudarles a poder llegar a las cotas máximas de su rendimiento deportivo sin caer en esta triada, son:
1) Llevar un registro de sus ciclos menstruales.
2) No saltarse comidas ni tenteempies
3) Visitar un dietista o nutricionista que trabaje con mujeres jóvenes deportistas.
4) Ser consciente y aceptar nuestras limitaciones, para poder hacer frente a la enorme presión del entorno cuando se practican deportes a alto nivel.