Enfermedades gastrointestinales en los cruceros.


La mayoría de los brotes de enfermedades gastrointestinales que suceden en los cruceros, se asocian a alimentos en mal estado y al agua de consumo almacenada.


Entre los factores que han contribuido a los brotes se incluyen:

- Agua almacenada y contaminada en tanques por desinfección inadecuada,
- Agua potable contaminada por las aguas residuales del barco debido al diseño y construcción deficientes de los tanques de almacenamiento de agua potable.
- Deficiencias en la manipulación, preparación y cocinado de alimentos, y el uso de agua del mar en la cocina del barco.

El norovirus o virus tipo Norwalk es el patógeno que interviene con más frecuencia en los brotes epidémicos. Los síntomas suelen comenzar con la aparición repentina de vómitos y/o diarrea. Puede haber fiebre, dolor abdominal y malestar.


Salud y cuidado personal.

El virus puede propagarse en los alimentos o el agua o de una persona a otra, se trata de un virus muy contagioso y en un brote a bordo, se pueden ver afectadas más del 80% de sus pasajeros. Para prevenir o reducir los brotes de gastroenteritis causados por el norovirus, los buques han mejorado las medidas de saneamiento del agua, los alimentos y la desinfección de las superficies.

También se toman otras medidas, como la colocación  de dispensadores manuales de gel en lugares estratégicos del buque y se insta a los pasajeros y a la tripulación a utilizarlos. Algunas empresas de cruceros piden que las personas que presentan síntomas gastrointestinales en los centros médicos de a bordo sean aisladas hasta que transcurran al menos 24 horas desde sus últimos síntomas, y en algunos barcos también se aísla durante 24 horas a las personas asintomáticas que hayan estado en contacto con los portadores.