El grupo de los lácteos, son alimentos que nos proporcionan calcio, vitamina D, potasio y otros nutrientes fundamentales para nuestra salud y bienestar.
Cuando vayamos a consumir productos lácteos como la leche, yogur o quesos, los nutricionistas nos proporcionan una serie de consejos encaminados a disminuir lo máximo posible el aporte calórico y de grasas saturadas sin perder los nutrientes básicos que este grupo de alimentos contiene.
1.- Elimine la grasa: beber leche descremada o baja en grasa (1%). Si esta habituado a la leche entera cambie progresivamente a la descremada.
2.- Aumente el potasio y la vitamina D pero reduzca el sodio: la leche y el yogurt son más ricos en potasio y vitamina D mientras que los quesos contienen mayor cantidad de sodio.
3.- Agréguelos a sus comidas: las combinaciones de leche descremada con cereales y avena o la de yogures descremados con frutas naturales son una buena alternativa a los desayunos más tradicionales.
4.- Los quesos en crema y las mantequillas no están incluidos en el grupo de los lácteos, por escaso contenido en vitamina D. Ademas son altos en grasas saturadas.
5.- Para las personas con intolerancia a la lactosa, existen alternativas como la leche sin lactosa o la de soja, debiendo consultar el etiquetado asegurándonos de que este último tipo de leche contenga 300 mgr. de calcio aproximadamente.
La cantidad recomendada de lacteos al día que debe tomar un adulto sano es de 4 raciones, que pueden ser:
- 1 vaso de leche (200-250 ml.)
- 2 yogures
- 50 gr. de queso curado
- 100 gr. de queso fresco.
Con ellas aportaremos a nuestro organismo los 1.000 mgrs. diarios de calcio que necesita.