Enfermedades transmisibles en aviones

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Aunque las investigaciones han demostrado que el riesgo de transmisión de cualquier tipo de enfermedad a bordo de un avión es extremedamente pequeño, ya que la calidad del aire de la cabina del avión se controla cuidadosamente, es importante tener unos conocimientos básicos en este tipo de viajes.


La ventilación proporciona un cambio total de aire 20-30 veces por hora. La mayoría de los aviones modernos cuentan con un sistema de recirculación que recicla hasta el 50% del aire de la cabina. Este aire recirculado generalmente pasa a través de filtros HEPA ("high-efficiency particulate air", filtros departículas aéreas de alta eficiencia") del mismo tipo quelos usados en quirófanos y UCIS de los hospitales para atrapar partículas de polvo, bacterias, hongos y virus.

Se puede producir transmisión de una infección entre pasajeros que están sentados en la misma zona del avión, normalmente como consecuencia de la tos o estornudos de una persona infectada o bien por contacto (directo o indirecto).No es una situación diferente de otras en que las personas están muy próximas unas de otras como en el tren, autobús o teatro.

Normalmente se utiliza una pequeña unidad de energía auxiliar para proporcionar ventilación mientras el avión permanece en tierra, antes de que los motores principales entren en funcionamiento. Aunque en ocasiones no se pone en marcha por razones ambientales (ruido) o técnicas. En estos casos, cuando esta relacionado con un retardo prolongado, los pasajeros pueden desembarcar transitoriamente.

En cuanto a la tuberculosis resistente a los fármacos se exige continua vigilancia para evitar la propagación de la infección durante los vuelos en avión. Para mas información se puede consultar la guía de la OMS "Tuberculosis and air travel: guidelines for prevention and control". 

Con el fin de minimizar el riesgo de transmisión de infecciones, los viajeros que se encuentran mal, especialmente si tienen fiebre, deben aplazar su viaje hasta que se hayan recuperado. Las personas que padezcan una enfermedad transmisible activa no deben viajar en avión. Las compañías aéreas pueden denegar el embarque a los pasajeros con apariencia de estar infectados por una enfermedad transmisible.