Según un estudio publicado recientemente y en el que ha participado la Universidad Complutense de Madrid (UCM), el 5% de la población española presenta adicción a los teléfonos móviles, que repercute en el normal desarrollo de sus actividades personales, laborales o familiares, llegando en algunos casos a provocar transtornos en la salud de las personas que lo sufren.
El objetivo fundamental del estudio ha sido intentar averiguar si ciertos estados psicológicos como la ansiedad , la depresión, la impulsividad o el consumo de alcohol serían factores que predisponen al uso excesivo de dispositivos móviles o son manifestaciones asociadas cuando ya se sufre la adicción.
Al cruzar todos estos factores se ha podido deducir que:
- La depresión, las drogas ilegales o algunas patologías psiquiátricas, como las obsesiones, son variables asociadas a la adicción al teléfono móvil.
- La ansiedad, la impulsividad y el consumo de alcohol serían variables que predispondrían, es decir que las personas que padecieran estas últimas manifestaciones tendrían más posibilidades de acabar usando de forma desmedida estos dispositivos.
Es importante tener en cuenta también otro resultado de este estudio, en que se indica el perfil de las personas a las que afecta este problema. Como era de suponer, afecta más a los jóvenes a partir de los 16 años, pero la incidencia también resulta alta en personas mayores de hasta 45 años. Dicho de otra forma, el problema a diferentes capas de nuestra población y no es exclusivo de jóvenes y adolescentes.