Consecuencias del uso inadecuado de las lentes de contacto.

El uso y cuidado inadecuado de las lentes de contacto pueden provocar infecciones oculares que en determinados casos producen lesiones graves en las corneas de nuestros ojos.


Las lentes de contacto son un método excelente para corregir los defectos de refracción de nuestros ojos (miopía, hipermetropía y astigmatismo), pero cuando las utilizamos de forma no segura, como dormir con ellas o usarlas durante demasiado tiempo sin sustituirlas, podemos desencadenar una infección ocular.

En un gran número de casos estas infecciones derivadas del uso incorrecto de las lentes de contacto no suelen ser muy graves, pero existe alrededor de un 10% de ellas que pueden alcanzar el rango de infecciones oculares graves, no solo por el importante tratamiento que requieren, también lo son por las consecuencias que se derivan de ellas, fundamentalmente lesiones corneales.

Generalmente el enrojecimiento ocular, visión borrosa, fotofobia (excesiva sensibilidad a la luz), lagrimeo, secreciones, inflamación de los párpados  e incluso dolor o sensación de tener algo en el ojo, son los síntomas de alarma que nos indican la presencia de una infección en nuestros ojos, debiendo recibir atención médica lo antes posible, para que esta no se complique.

La afectación de la cornea sucede en alrededor del 10% de las personas con infección y en 1 de cada 5 de estos casos, deja cicatrices en el tejido corneal, que en algunas personas provoca una perdida importante de la visión de forma permanente.

Las recomendaciones básicas en el correcto uso de lentes de contacto que hacen los especialistas en la materia podemos resumirlas en:

- No dormir con las lentes de contacto puestas, ya que aumentamos entre 6 y 8 veces el riesgo de padecer una infección ocular

- Reemplazarlas según las indicaciones de tiempo de uso del fabricante y de lo que nuestro oftalmólogo nos pueda decir al respecto, pues puede haber algún tipo de modificación a estas indicaciones por características especiales en nuestros ojos.

- No usar soluciones viejas o incorrectas a la hora de conservar nuestras lentes de contacto.

- Debemos lavar siempre las manos antes de colocarse las lentes en los ojos.